Citas aberrantes en el Corán acerca de las mujeres
en las que el Imán justifica sus palabras
Autor: Lic. Dawlin A. Ureña
Muchos dicen que una religión se puede considerar sobre la base de su posición con respecto a las mujeres.

Todas las citas son de esta traducción del Corán.
1. Los hombres musulmanes se pueden casar hasta con 4 mujeres, pero a las mujeres no se le permite casarse con más de un hombre.
"Si tienen miedo de no ser equitativos con los huérfanos, entonces, cásense con las mujeres que les gusten: dos, tres o cuatro de ellas. Pero si tienen el temor de no obrar con justicia, entonces con una sola o con varias de vuestras esclavas. Así, evitarán mejor el obrar mal." Sura 4:3.

2. La herencia de un hombre es el doble de la herencia de una mujer
"Alá les ordena lo siguiente en lo que toca a sus hijos: que la porción del varón equivalga a la de dos hembras. Si éstas son más de dos, les corresponderán dos tercios de la herencia. Si es hija única, la mitad." Sura 4:11.

3. "Golpear a sus esposas", ¡última alternativa!
"Los hombres tienen autoridad sobre las mujeres en virtud de la preferencia que Alá ha dado a los hombres sobre las mujeres y de los bienes que gastan. Las mujeres virtuosas son devotas y cuidan, en ausencia de sus maridos, de lo que Alá manda que cuiden. ¡Amonesten a aquéllas de quienes tengan temor que puedan rebelárseles, déjenlas solas en el lecho, y péguenles! Si les obedecen, no se metan más con ellas. Alá es excelso, grande." (4:34).

4. Recompensa para aquellos que merezcan el Paraíso.
"Tendrán a su alcance la fruta de los dos jardines… Estarán en ellos mujeres de recatado mirar, no tocadas hasta entonces por hombre (vírgenes)… (55:54 & 56)
" Nosotros las hemos formado de manera especial (a las vírgenes) y las hemos hecho vírgenes… afectuosas, y de una misma edad…para los de la derecha (los que alcancen el paraíso)" (56:35-38).
"En cambio, a los temerosos de Alá se les deparará el éxito: jardines y viñedos… vírgenes de senos túrgidos (voluptuosos), y de una misma edad… de copa desbordante… Es una retribución de tu Señor (Alá), regalo bien pensado." (78:31-33).

Sostengo la interpretación de dichas suras del Corán porque sus palabras contienen lo que significan, pero algunos eruditos sostienen que dichas líneas deben ser interpretadas de otro modo, abarcando todo el contenido del texto religioso. El Islam, aunque sosteniendo que hombre y mujer comparten la mismas esencia humana, afirma que son diferentes; es decir, que el hombre y la mujer desempeñan papeles contrarios y ello no significa la superioridad de un sexo sobre otro. Así, sostiene que las mujeres poseen el sentido de maternidad porque son más aptas para el cuidado y la atención del bebé, que hay entre ellos dos un vínculo o nexo que va más allá de cualquier tradición. En el sentido inverso, las obligaciones de los hijos hacia las madres son mayores que hacia los padres, fruto entre otras palabras coránicas de las del profeta Muhammad que al responder a uno de los compañeros a quién debía honrar más, éste le contestó tres veces que a su madre y la cuarta a su padre.

Además, y a pesar de que a las mujeres no se las permite acudir a rezar a las mezquitas, quienes defienden esta postura sostienen que hay prácticas de carácter público y de carácter privado, entre ellas las peregrinación obligatoria tanto para el hombre como para la mujer o el Salat del Id que tiene lugar dos veces al año, una tras la peregrinación a la Meca y otra tras el Ramadán, en las que ambos sexos participan conjuntamente. En este sentido, uno de los versículos del Corán se dice: “El hombre y la mujer creyentes son Awliyya -se ayudan mutuamente-. Ambos están sujetos a lo que es correcto y prohíben lo que es dañino. Realizan el Salat, pagan el Çakât y se someten a Allah y a su Mensajero, por lo que Allah les recompensará con Rahma“.

No obstante, la Biblia cristiana y otros textos religiosos dedican en sus líneas lindezas similares a la mujer -que deben ser interpretadas en el contexto histórico en el que se dictaron- y a sus actos como las lapidaciones por adúlteras o su rol social de mujeres florero que algunas culturas y pueblos en su desarrollo social, cultural, económico han ido -o están- superando. Otras, por evolución o agentes sociales poderosos a quienes les conviene mantener ambos roles diferenciados, continúan ancladas. Será necesario permitirles evolucionar por sí mismos.

Por último, recordar que la religión a pesar de favorecer la inserción social de determinados valores morales, es también el opio del pueblo y amparados en ella se siguen cometiendo las peores aberraciones Apelar al derecho de los pueblos a evolucionar por sí mismos, recordar que en todas las religiones mayoritarias se discrimina a la mujer y alentar al sexo femenino a acabar con ello. No rezo, pero sí sueño con que mi vida no se apague sin comprobar que se ha acabado con esto.

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1. Carta personal